El faraón Ay
Dos posibles retratos del faraón Ay |
Ay es probablemente hijo de Yuya y Tuya, padres de la reina Tiye. En tal caso sería también el hermano menor de Aanen, gran sacerdote de Atum-Ra en Heliópolis, y segundo profeta de Amón en Tebas. No hay pruebas documentales directas de tal filiación, pero sí indirectas : parecido de la momia de Yuya con las estatuas del faraón Ay, posición de Ay en la corte real muy similar a la de Yuya, bastantes titulos idénticos, algunos no hereditarios y otros usualmente transmitidos por tradición familiar, etc. Además, su nombre se transcribe "Ay" para distinguirlo de Yuya, pero en egipcio es el mismo nombre.
Ay es también, muy probablemente, el padre de Nefertiti y de Mut-Nedjemet (esposa de Horemheb), y el abuelo de Tutankhamon. Tenía, además, un hijo llamado Nakht-Min, que murió antes que el padre, por lo que hubo que coronar a Horemheb. Si Tutankhamon es nieto de Ay, y no es hijo de Nefertiti, quizá la esposa de Akhenaton llamada Kiya sea hija de Ay y madre de Tutankhamon.
Ay fue un comandante militar, el jefe de la caballería del faraón, como había sido Yuya antes que él. También, como Yuya, Ay fue sacerdote de Min en Akhmim. Parece que se casó dos veces antes de reinar, y que la que llegó a ser su primera reina (llamada también Tiye, quizá una prima) había sido la nodriza de Nefertiti, y probablemente la madre de Mut-Nedjemet, mucho más joven que el resto de los hermanos, ya que era de la edad de las hijas medianas de Akhenaton y Nefertiti.
Si cierto anillo con los dos nombres es auténtico, consta también que Ay se casó con Ankh-es-en-Amon, viuda de Tutankhamon, pero, como no hay rastro de ella aparte de ése en todo el reinado de Ay ni tampoco en el de Horemheb, quizá se tratase de una boda in articulo mortis : la joven pudo enfermar, o tener un mal parto del último vástago de Tutankhamon. Con ello, Ay trataría de evitar que ella muriera sin su título de reina (que habría conservado, al enviudar, de haber tenido un hijo varón).
Como ex-regente de Tutankhamon, Ay no necesitaba el matrimonio para acceder a la corona.
Muchos autores presentan a Ay como el asesino de Tutankhamon, presto a luchar contra Horemheb por el trono. Pero no hay ningún dato que apoye esas ideas. Lo que es más, hay indicios de que Ay era el abuelo de Tutankhamon y de su esposa, y de que fue él quien escogió a Horemheb para sucederle, como Horemheb haría luego con Ramsés I. Incluso hay datos que apuntan a una corregencia entre Ay y Horemheb. Y luego está el factor del parentesco, ya que Horemheb contrajo matrimonio con Mut-Nedjemet, hija de Ay, que quizá había estado casada con Nakht-Min (si no se trata del Nakhat-Min hijo de Aanen, sobrino de Ay, y de otra Mut-Nedjemet).
Se han interpretado los destrozos de la tumba de Ay y la apropiación de sus monumentos por parte de Horemheb como una damnatio memoriae ejercida por éste contra Ay. Pero no hay certeza de quién cometió los destrozos, y la apropiación de los monumentos de un faraón por otro era una costumbre muy antigua en Egipto, que no tenía por objeto hacer olvidar al faraón anterior, sino venerarlo, asumiendo, además de su rol, su imagen (algo sagrado para los egipcios) y su personalidad. En cuanto a destrozos, la tumba menfita de Horemheb los sufrió también, y no fue una damnatio memoriae de sus sucesores, ya que los ramésidas le veneraban, y las posteriores dinastías extranjeras, más o menos indiferentes a él, toleraron su culto. Además, si los destrozos de la tumba de Ay hubiesen sido ordenados por Horemheb, no se entiende por qué éste respetó la imagen de Ay como faraón presente en la tumba de Tutankhamon. ¿Y cómo creer que Horemheb, si execraba a Ay, aceptara que estatuas de éste llevaran el nombre de Horemheb, poniendo a Horemheb la cara de Ay?
Ay es también, muy probablemente, el padre de Nefertiti y de Mut-Nedjemet (esposa de Horemheb), y el abuelo de Tutankhamon. Tenía, además, un hijo llamado Nakht-Min, que murió antes que el padre, por lo que hubo que coronar a Horemheb. Si Tutankhamon es nieto de Ay, y no es hijo de Nefertiti, quizá la esposa de Akhenaton llamada Kiya sea hija de Ay y madre de Tutankhamon.
Ay fue un comandante militar, el jefe de la caballería del faraón, como había sido Yuya antes que él. También, como Yuya, Ay fue sacerdote de Min en Akhmim. Parece que se casó dos veces antes de reinar, y que la que llegó a ser su primera reina (llamada también Tiye, quizá una prima) había sido la nodriza de Nefertiti, y probablemente la madre de Mut-Nedjemet, mucho más joven que el resto de los hermanos, ya que era de la edad de las hijas medianas de Akhenaton y Nefertiti.
Si cierto anillo con los dos nombres es auténtico, consta también que Ay se casó con Ankh-es-en-Amon, viuda de Tutankhamon, pero, como no hay rastro de ella aparte de ése en todo el reinado de Ay ni tampoco en el de Horemheb, quizá se tratase de una boda in articulo mortis : la joven pudo enfermar, o tener un mal parto del último vástago de Tutankhamon. Con ello, Ay trataría de evitar que ella muriera sin su título de reina (que habría conservado, al enviudar, de haber tenido un hijo varón).
Como ex-regente de Tutankhamon, Ay no necesitaba el matrimonio para acceder a la corona.
Muchos autores presentan a Ay como el asesino de Tutankhamon, presto a luchar contra Horemheb por el trono. Pero no hay ningún dato que apoye esas ideas. Lo que es más, hay indicios de que Ay era el abuelo de Tutankhamon y de su esposa, y de que fue él quien escogió a Horemheb para sucederle, como Horemheb haría luego con Ramsés I. Incluso hay datos que apuntan a una corregencia entre Ay y Horemheb. Y luego está el factor del parentesco, ya que Horemheb contrajo matrimonio con Mut-Nedjemet, hija de Ay, que quizá había estado casada con Nakht-Min (si no se trata del Nakhat-Min hijo de Aanen, sobrino de Ay, y de otra Mut-Nedjemet).
Se han interpretado los destrozos de la tumba de Ay y la apropiación de sus monumentos por parte de Horemheb como una damnatio memoriae ejercida por éste contra Ay. Pero no hay certeza de quién cometió los destrozos, y la apropiación de los monumentos de un faraón por otro era una costumbre muy antigua en Egipto, que no tenía por objeto hacer olvidar al faraón anterior, sino venerarlo, asumiendo, además de su rol, su imagen (algo sagrado para los egipcios) y su personalidad. En cuanto a destrozos, la tumba menfita de Horemheb los sufrió también, y no fue una damnatio memoriae de sus sucesores, ya que los ramésidas le veneraban, y las posteriores dinastías extranjeras, más o menos indiferentes a él, toleraron su culto. Además, si los destrozos de la tumba de Ay hubiesen sido ordenados por Horemheb, no se entiende por qué éste respetó la imagen de Ay como faraón presente en la tumba de Tutankhamon. ¿Y cómo creer que Horemheb, si execraba a Ay, aceptara que estatuas de éste llevaran el nombre de Horemheb, poniendo a Horemheb la cara de Ay?
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